domingo, 13 de abril de 2008




Quisiera contar todo aquello que el me dió, pero hay ciertos
amores que se llevan con un silencio egoista, y sólo aquel que lo vive y lo siente, tiene derecho a saber.

Cambió de manera maravillosa y sorprendente mi vida entera.

Cuando le vi por vez primera comprendí que ya para siempre cambiaría el rumbo de mi piel.

Mi pasado entero y mi futuro incierto quedaron por completo en sus manos, tan diminutas....

Mis días transcurren en la placidez de la melodía de sus pasitos
correteando , en la candidez de su risa mientras tararea con torpeza las canciones recien aprendidas en la escuela.

Y aún se dormirá sobre mi pecho muchas noches más, mientras le canto en un susurro las aventuras de su Barquito de Cáscara de Nuez.

2 comentarios:

Sirena Varada dijo...

Si tu pasado y sobre todo tu futuro se quedan atrapados en unas pequeñas y tibias manos, en la mirada más tierna, en la sonrisa más cálida... ¿Dónde mejor?

ZenyZero dijo...

Nadie vive tanto como para querer del todo. Es incierta la huida del amor porque nos deja sus huellas. Una pista que las mareas no borran, ni las tempestades con máscaras de futuro arruinarán sus genes.
Fruto de lo que nunca quisimos del todo.

Duerme. Duérmete mi bien. Porque te querré del todo.

Chuff!!